¡DESPERTAD, OH JÓVENES DE LA NUEVA ERA!

¡DESPERTAD, OH JÓVENES DE LA NUEVA ERA!

-10%
$ 168.00
$ 151.20
Pesos mexicanos (MXN)
AGOTADO. Informes: Llame o Escribanos
Editorial:
AUSTRAL
Año de edición:
ISBN:
978-607-07-3802-9
Páginas:
304
Encuadernación:
Rústica (pasta blanda)
-10%
$ 168.00
$ 151.20
Pesos mexicanos (MXN)
AGOTADO. Informes: Llame o Escribanos

Cuando viajo fuera del país durante cierto tiempo, incluidas las visitas profesionales, tomo una precaución para no perder mi presencia de ánimo ni mi equilibrio emocional mientras soy una planta rodadora en un paisaje ajeno: me aseguro de llevar conmigo los libros que he estado leyendo antes de mi partida. Solo en un país extranjero, como en el que estoy ahora, he sido capaz de animarme a mí mismo frente al temor, la irritación y el desaliento, prosiguiendo la lectura de los libros que leía en Tokio antes de partir.

Esta primavera he viajado a Europa; quizá debería decir arrastrado de Viena a Berlín con un equipo de televisión, a lo largo de una carretera con árboles desnudos de flores, salvo las forsythias que se vuelven tumultuosamente amarillas antes de que aparezcan sus hojas y las yemas de color azafrán broten del suelo, sin flores. Había llevado conmigo cuatro volúmenes de la edición en Penguin Classics de Malcolm Lowry, al que había estado leyendo continuamente durante varios años. Digo leyendo, pero también escribí una serie de narraciones breves construidas en torno a metáforas que Lowry me había inspirado. Mi propósito al releer a Lowry mientras viajaba era poder decirme a mí mismo al final del viaje: ¡Basta! ¡Por lo que a mí respecta, ya he acabado con Lowry! Y como parte de este proceso regalaría a cada uno de mis compañeros de viaje un volumen de Lowry. Cuando yo era joven, mi impaciencia me impidió detenerme mucho tiempo en un solo autor. Conforme dejaba atrás la mediana edad, se me hizo patente el grupo de escritores que leería con atención en mis últimos años y hasta mi muerte. Así pues, de vez en cuando me sentía obligado a emprender conscientemente la tarea de acabar con uno u otro.