Dos preguntas van a atravesar el conjunto de estos escritos: ¿Es posible la atención a la diversidad en un mundo sigdo por la exclusión social?, ¿Es factible promover, desde nuestras actuales instituciones educativas, u educación para la diversidad? Dos preguntas que apuntan al corazón de las cuestiones sociales e institucioles de hoy, intentando despejar el campo de las retóricas vacías, y que nos acercan a la realidad señalando los máximos riesgos y las mayores responsabilidades: desterrar las prácticas de subjetivantes, resituar la problemática de la educación especial desde u perspectiva de reconstrucción integral del lazo social. Los textos se proponen desentrañar el funciomiento de un campo, desequilibrar la comodidad de las nuevas palabras que llegaron con la bue obtención de quedarse para cambiar las prácticas, esas mismas expresiones que pueden dejar de decir aquello por lo que fueron convocadas: instituir nuevas significaciones, y que, ante los nuevos problemas, corren el riesgo de operar en u suerte de como si, sin develar las reformas de exclusión que hacen aparición: el afuera del adentro.