El tema central de esta importante obra junguiana es la representación simbólica de la totalidad psíquica mediante el concepto del «sí-mismo», cuyo equivalente histórico y tradicional es la figura de Cristo. Jung demuestra su tesis investigando las Allegoriae Christi, especialmente el simbolismo del pez y los símbolos gnósticos y alquímicos, que considera fenómenos de asimilación cultural. Los capítulos sobre el yo, la sombra, el animus y el ánima constituyen una valiosa integración de los conceptos claves del sistema junguiano.