El autor nos propone a Cristo como el prototipo del hombre feliz que conduce a quienes lo siguen, hacia el dichoso y consolador camino de la felicidad completa.
Es un libro que, con lenguaje sencillo, nos expone las formidables enseñanzas de santo Tomás de Aquino acerca de la felicidad que nos trajo Jesús: ...Mi yugo es suave y mi carga ligera. Síganme y sus almas encontrarán descanso... No es un libro de recetas mágicas, sino de conquista personal.