El presente volumen recoge varias series de poemas fragmentarios que implican, de entrada, la resolución de un itinerariogeográfico. Sin embargo, bajo la alfombra de la toponimia, bullen las aguas termales de la experiencia poética, Jorge Ortega > descubre al lector el cartapacio de sus vaivenes, el diario de ruta que contiene el testimonio de impresiones y vivencias a lo largo y ancho del propio cabotaje, el del lugar de orígen, y el ajeno, el de fuga vacacional. Si Bitácora del nativo es un fardo de apuntes literarios en torno a las escalas de un solo viaje, la interiorización de los alrededores, tambi?n resulta un paseo por la memoria personal. Jorge Ortega > expone con la relativa objetividad del antropólogo y la alucinatoria sensibilidaddel poeta lírico la imagen que le depara la matriz de sus varianzas, la sede de sus desplazamientos habituales. He aquí, pues, la visión y el sentimiento de un joven poeta hacia las coordenadas rústicas y citadinas que han hospedado el rumbo de sus pasos.