COMPENDIO DE ENERGIA SOLAR FOTOVOLTAICA TERMICA Y TERMOELECT

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$ 1.15
Pesos mexicanos (MXN)
AGOTADO. Informes: Llame o Escribanos
Editorial:
MUNDI PRENSA (ME)
Año de edición:
ISBN:
978-84-8476-339-0
Páginas:
431
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A finales del siglo XVII el hombre empezó a utilizar combustibles fósiles que la tierra había acumulado en el subsuelo durante su historia geológica. La quema de petróleo, carbón y gas natural ha causado un aumento del CO2 en la atmósfera que últimamente es de 1,4 p.p.. al año y produce el consiguiente aumento de la temperatura. Se estima que desde que el hombre mide la temperatura hace unos 150 años (siempre dentro de la época industrial) ésta ha aumentado 0,5?C y se prevé un aumento de 1?C en el 2020 y de 2?C en el 2050. A principios del siglo XXI el calentamiento global parece irrefutable, a pesar de que las estaciones meteorológicas en las grandes ciudades han pasado de estar en la periferia de la ciudad, al centro de ésta y el efecto de isla urbana también ha influido en el aumento observado. Los últimos años del siglo XX se caracterizaron por poseer temperaturas medias que son siempre las más altas del siglo. Las pruebas científicas son hoy día incuestionables: el cambio climático constituye una seria amenaza mundial, que exige urgentemente una respuesta a nivel global. Las consecuencias de nuestras acciones presentes sobre los futuros cambios climáticos poseen largos tiempos de espera. Lo que hagamos ahora solamente tendrá un impacto limitado sobre el clima de los próximos 40 ó 50 años. Por otra parte, las medidas que se adopten en los próximos 10 ó 20 años influirán profundamente sobre el clima de la segunda mitad del siglo actual y del siguiente. Si bien es cierto que nadie puede predecir con total certeza las consecuencias del cambio climático, sí que contamos con suficientes conocimientos para percatarnos de los riesgos. La mitigación (puesta en práctica de firmes medidas para reducir las emisiones) deberá entenderse como una inversión, un coste incurrido ahora y en las próximas décadas para evitar el riesgo de consecuencias muy graves en el futuro. Si estas inversiones se realizan acertadamente, los costes serán razonables y, al mismo tiempo, se abrirá una amplia gama de oportunidades de crecimiento y desarrollo. Por otra parte, en las últimas décadas las diferentes crisis económicas de energía y los problemas de contaminación ambiental han provocado el crecimiento de toma de conciencia entre los ciudadanos del mundo, concienciándose para no utilizar las energías tradicionales provenientes de los combustibles fósiles y tratar de consumir energía procedente de fuentes alternativas.