En los últimos años, la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos ha sufrido importantes modificaciones, algunas de ellas de tal relevancia que prácticamente se puede hablar de un nuevo derecho constitucional mexicano. Las acciones colectivas, la protección a los datos personales, el derecho de acceso a la información, a las telecomunicaciones (incluyendo el Internet), entre otros, constituyen innegables avances en nuestro texto constitucional, correspondiendo a los abogados y ciudadanos en general dilucidar las ventajas que estas figuras incorporan y llevarlas a la práctica.áDentro de este contexto de reformas, destacan por su especial importancia las introducidas en junio de 2008, conocidas como reformas en materia penal y desde luego las de junio de 2011 que introdujeron a nuestra Carta Fundamental el paradigma de la protección más amplia a los derechos humanos y la obligación expresa en ese sentido que la Constitución mexicana impone a las autoridades, lo que conforma el principio pro homine, elevado por virtud de esta reforma al más alto rango de nuestro sistema jurídico.áEn esta obra el autor presenta un análisis de los primeros veintinueve artículos de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que conforman el Título y Capítulo Primero denominado ´De los Derechos Humanos´; haciendo una exposición del contenido de los dispositivos en comento, a fin de puntualizar sus alcances y los derechos fundamentales que de éstos se desprenden. El autor fortalece sus comentarios acudiendo a los antecedentes históricos de cada uno de los artículos así como a los criterios que sobre la aplicación de los mismos han sentado los tribunales que conforman el Poder Judicial Federal.