Por la manera atractiva en que se presentan cuentos y fábulas, el autor logra atraer la atención de lectores y escuchas, originando un mayor acercamiento entre generaciones y sobre todo hacia el interior de las familias.áComo padres de familia o maestros podemos aprovechar la calidad objetiva de su temática que está en consonancia con nuestro contexto familiar, escolar y social, además de su correlación con aforismos, moralejas e ilustraciones, que nos familiarizan con los valores universales, trasladándolos a la práctica en la vida cotidiana, en donde los adultos, con nuestro ejemplo, apoyemos a los futuros ciudadanos a desarrollar sus capacidades de autoformación. Estaremos doblemente complacidos por cumplir nuestro compromiso de formar hombres y mujeres de bien, con valores y principios morales, reflexivos, críticos, comprometidos y congruentes, capaces de tomar decisiones razonadas y, lo más importante, que sean felices, como los queremos ver.