Recoger la memoria del quehacer docente en un diario de trabajo es un planteamiento del Programa de Educación Preescolar 2004 para recopilar información que permita evaluar, pero, también, el diario constituye u herramienta útil para las maestras y los maestros que intentan responder a la necesidad de reflexior críticamente sobre su tarea para modificar sus ideas y experimentar formas distintas de organizar los procesos de enseñanza y aprendizaje, con el objeto de fortalecer las capacidades y posibilidades de aprendizaje de sus alumnos. Reflexior críticamente sobre el quehacer docente supone hacer explícitas nuestras creencias y prácticas, considerar las razones que las sostienen y las repercusiones que pueden tener en los niños y las niñas que son nuestros alumnos a lo largo de un año escolar. La reflexión es u valoración honesta, abierta y responsable de lo que hacemos en nuestro trabajo cotidiano y nos mueve a modificar nuestras formas de actuar. Reflexior involucra tanto la intuición, como la emoción y la pasión que se desprenden del amor a nuestro trabajo, de nuestro interés y compromiso por lograr que los niños y las niñas a nuestro cargo obtengan en su educación los aprendizajes que les permitan conocerse a sí mismos, conocer y relaciorse con los demás, comprender y explicarse el mundo tural y el social, lo que se convierte en u necesidad permanente de cuestiornos por qué hacemos lo que hacemos y qué repercusiones tiene eso en nuestros alumnos y alums. Por lo tanto, escribir un diario de trabajo no significa aplicar u serie de técnicas determidas de manera general y uniforme, sino buscar altertivas que nos acerquen cada vez más a ser mejores guías y facilitadores de nuestros alumnos.
