Casandra fue la que inició todo el desmadre. Ella llegó y chismeó: el puto de don Cosme, el de la carnicería «La Higiénica», aseguro que la verdulera Marlene, Mayra la pollera y Gladys la de los jugos y los chocos eran una méndigas tortillera. Que las tres andaban dándose sus quiebres. Eso fue lo que le contó don Cosme a Casandra la de la cremería «Clarabella» cuando fue a comprarle sus bistecitos...