Una de las mayores controversias dentro de la administración de justicia son los delitos sexuales, sustentado por la ausencia de testigos y la relación asimétrica víctima-agresor; debido a ello, es considerado uno de los delitos de mayor complejidad en la investigación penal. La complejidad aumenta cuando el desconocimiento y la escasa comprensión de aspectos médicos, como la anatomía y fisiología del cuerpo humano, convierten a la actividad pericial en un desafío para el médico legista y al juez lo coloca en una posición difícil porque sus decisiones, en la gran mayoría de los casos, se inspiran en el dictamen pericial, más aún cuando se considera a los peritos como ´los ojos del juez´.áEstos aspectos nos invitan a reflexionar sobre la enorme responsabilidad que representa el dictamen médico en el delito sexual, de ahí la importancia en la formación profesional y el uso de instrumentos con información pertinente, de tal forma que le permita al médico enfrentar retos que se le presentan en el ejercicio de su profesión y saber que puede trabajar con la ´ciencia del médico, con la veracidad del testigo y con la ecuanimidad del juez´.áNuestro Profesor y dilecto amigo, Luis Alberto Kvitko, como ya es su costumbre, pone a consideración la edición ecuatoriana de su libro ´El Himen: Estudio Médico-legal´, obra que estamos seguros será una excelente herramienta de trabajo con la cual contará el médico legista al momento de su práctica pericial y su posterior valoración como prueba.
