Gracias a los instintos de exploración que les permitieron a nuestros ancestros prosperar hace cientos de años, los humanos desarrollaron un estilo, cognitivo que Mlodinow llama pensamiento elástico, un juego único de talentos que incluyen la neofilia (una afinidad por la novedad), la esquizotopia (una tendencia hacia la percepción inusual), la imaginación y generación de ideas, así como el pensamiento divergente e integrador. Estas son las cualidades que permitieron a los innovadores, desde Mary Shelley hasta Miles Davis, y desde el inventor de tamaño gigante de palomitas de maíz hasta los creadores de Pokémon Go, lograr cambios de paradigma en nuestra cultura y nuestra sociedad.