Estambul es un retrato, en ocasiones panorámico y en otras íntimo y persol, de u de las ciudades más fascintes de la Europa que mira a Asia. Pero es también u autobiografia, la del propio Orhan Pamuk. La historia da comienzo con el capítulo de su infancia, en la que Pamuk nos habla sobre su excéntrica familia y su vida en un polvoriento apartamento -?los apartamentos Pamuk?, así los denomi- en el centro de la ciudad. El autor recuerda que fue en aquellos días lejanos cuando tomó conciencia de que le había tocado vivir en un espacio plagado de melancolía: residente de un lugar en que arrastra un pasado glorioso y que intenta hacerse un hueco en la ¡modernidad?.Viejos y hermosos edificios en ruis, estatuas valiosas y mutantes, villas fantasmagóricas y callejuelas secretas donde, por encima de todo, des-taca el terapéutico río Bósforo, que en la memoria del rrador es vida, salud y felicidad. Esta elegía sirve para que el autor introduzca a pintores, escritores y célebres asesinos, a través de cuyos ojos el rrador describe la ciudad. Hermoso retrato de u ciudad y u vida, ambas fascintes por igual.