Presenta una visión irónica, crudo, pero realista de lo que ocurre en la línea divisoria entre ambos países - México y los Estados Unidos - en la ciudad de Tijuana, que es testigo de los efectos de la inmigración, a los miembros de la familia que dejan y extraños que llegar, y para los inmigrantes que aman a su barrio y protegen mutuamente.