De entre las muchas instituciones que podemos considerar, la escuela tiene un significado particular. No sólo es el lugar en el que los escolares pasan una gran cantidad de tiempo (Fifteen thousand hours nos viene a la memoria, título del informe que elaboró Rutter en 1979), sino que, además, la escuela es la primera introducción de los niños y niñas a un ambiente y a un sistema diferente de la vida cotidiana de la familia. Constituye un espacio más amplio, está organizado de manera más formal y los propósitos y roles que la gente desempeña en su seno varían a los utilizados en el hogar. La primera función de la escuela debe ser ayudar a los escolares a progresar académicamente, pero las oportunidades de aprendizaje que la circundan abarcan mucho más de lo que expresa el contenido de las lecciones.
