Lo que más atrae en la lectura de las ´Fábulas´ es la mezcla de sabiduría popular con un gracejo irónico de las situaciones. La personificación de los animales representando un tipo definido (zorra-astucia, hormiga-laboriosidad) acentúa la aceptación universal de estos relatos, que Samaniego supo presentar con aire y color españoles y acercar la experiencia poética y multisecular de los apólogos indios, de los autores clásicos Esopo y Fedro y de La Fontaine.