El 29 de junio de 1913, Rafel de la Torre, el faquir Ali Ben Hurr, fue enterado en estado de trance en la plaza de toros La Lidia en Tabasco. Sobre su cuerpo aislado en un féretro de cristal, transcurrido la corrida de toros de aquella tarde que nadie recorreria si no la hubiera marcado la tragedia.