Federico es un niño insoportable: escupe, pica los ojos y muerde, rompe los juguetes ajenos y también los propios, se mete los dedos a la riz y hace la tarea cuando le da la ga. Es de esos que se introducen en la boca doce barras de chicle para después pegarlas en la cola de un gato o en el pelo del primero que se le ponga enfrente... Este niño consentido, grosero y llorón vivirá algo que lo hará cambiar para siempre.