El destino: No es un secreto insondable pues, aunque parezca que todo está escrito, nada es inmutable, todo puede ser nuevamente reescrito. La libertad: cada uno es libre de escoger su propio destino El oráculo: es un amigo sincero que te coge de la mano cuando te sientes inseguro y confuso. El juego: más cercano a la mentalidad occidental, es un método para interrogar y cambiar nuestro destino.