El proceso de descolonización de los países hispanoamericanos fue obstaculizado por innumerables intervenciones extranjeras que retrasaron la consolidación de los nuevos Estados nacionales. Las potencias de la época buscaron ocupar el lugar de la antigua metrópoli. Después de once años de guerra, México consumó la Independencia del imperio hispano en 1821, sin embargo, España la reconoció hasta 1836, después de un intento de reconquista en 1829. ello hizo que creciera la animadversión hacia los españoles y evitó que se formara una comunidad iberoamericana. La política de la Corona española contribuyó a la vulnerabilidad de sus antiguas colonias. En contraste con lo anterior, los ingleses y los estadounidenses pronto establecieron relaciones y la comunidad británica existe hasta nuestros días.
