Oaxaca es una tierra de pintores y escritores. Desde épocas muy tempranas los habitantes de esta región en el Sur de México y en el corazón de Mesoamérica han producido palpables muestras de su genio creativo. Entre los ejemplos más ilustrativos del arte mesoamericano encontramos las piedras grabadas, las pinturas murales, cerámicas decoradas y tantas obras de arte creadas por los antiguos para registrar sus pensamientos y su historia. En este proceso participaron todos los pueblos originarios de esta región cultural en el centro de Mesoamérica. Tanto los relieves e inscripciones de la época clásica (Monte Albán) con los famosos ´códices´ (libros pictóricos) del postclásico son testimonios de ello, y han dado fama a Oaxaca en el mundo como una de las cunas de la gran arquitectura, escritura y de civilización. Este arte se caracteriza por la unidad de lo arquitectónico, gráfico y lo pictórico, algo que en nuestra época que es muy visual podemos apreciar mejor.