´Duerme aquí, silencioso e ignorado el que en vida vivió mil y u muertes >...´ En estas págis ce, vive y muere (al menos por el momento) el fotógrafo Castellón, uno de los persojes más atractivos y enigmáticos de la literatura hispanoamerica reciente. El lector verá a través del ojo de su cámara la contrahechura alucinte de nuestras ciolidades -puro botín en la rebatinga de los poderosos-, la fantasía derrotada de los ideales y las utopías, la más persistente de ellas el cal por Nicaragua, y la convocatoria del genio y la miseria en diversos escerios, desde el puerto de Greytown en Nicaragua, con sus palacios de mármol en medio de la selva, al ghetto de Varsovia y al mosterio de la Cartuja en Mollarca. El mercerio Walker, el rey Mosco, la rei Victoria, poleón el pequeño, el archiduque Luis Salvador y su extravagante cortejo, Flaubert, Turguéniev y George Sand, sin olvidar a Chopin, se dan cita aquí, junto con la pluma envidiosa de escandaloso Vargas Vila y la prosa florida de Rubén Darío. En esta magnífica novela resuen graves las notas de la derrota, compañera inevitable de toda empresa huma.
