Las pastorelas reflejan la eterna lucha entre el bien y el mal. Eran el instrumento con que los antiguos evangelizadores transmitían a los indios de las Américas las nociones del cristianismo, y con el tiempo se fueron convirtiendo en un género popular. Por su parte, los villancicos nacieron en Europa, a finales del siglo XVI y eran cánticos entonados por los habitantes de las villas, de ahí su nombre. Muchos de ellos llegaron a nosotros para cantarlos en la época más emotiva y espiritual del año. Esta obra contiene una selección de las más hermosas pastorelas y los más populares villancicos, y constituye un tesoro que no puede faltar en la biblioteca familiar.