En el ámbito de la Medicina se presenta una revolución que tendrá profundos efectos, no sólo en la forma en que se practica esta disciplina sino también en la manera como se enseña. Se ha producido un desplazamiento significativo en la atención médica de la sala de hospitalización al ámbito externo, y del tratamiento episódico al preventivo. Los avances biomédicos y tecnológicos han hecho que la atención intrahospitalaria sea aún más compleja, del mismo modo ha aumentado el número de niños vulnerables con enfermedades crónicas complejas que sobreviven hasta la edad adulta.áPediatría para estudiantes de Medicina se escribió en medio de esta revolución para servir como texto introductorio durante las experiencias clínicas en la facultad. Procura hacer algo que ningún otro libro ha intentado: concentrarse en las habilidades de evaluación y en las estrategias lógicas para los problemas pediátricos, tanto frecuentes como raros, y en el desarrollo de diagnósticos diferenciales racionales, resaltando la importancia de la fisiopatología. Hace énfasis también en lo esencial de la medicina pediátrica moderna con una visión hacia los retos del nuevo siglo. Resalta la perspectiva de desarrollo única del pediatra y la oportunidad de prevenir enfermedades mediante el cambio de los hábitos en una etapa inicial. También la importancia de las implicaciones médicas, epidemiológicas y sociales de nuestra población pediátrica multicultural.