Mientras se forjaba su leyenda, el Priorato era el núcleo duro y la pulpa de u nuez con u cáscara prestigiosa : la Orda Milites Templi orden de los caballeros templarios . Se ponían detrás de la historia y de la política del medievo, como sus auténticos inductores. No se apearon del fraude hasta files del pasado siglo, cuando ante sus mismos cofrades, ya era imposible sostenerlo. Pero la leyenda andaba ya sus propios pasos. Según sus Estatutos, el Priorato de Sión tiene como objetivos restituir la antigua Caballería, la ayuda mutua entre sus miembros y disponer un Priorato que sirva a los suyos de centro de estudios, meditación reposo y oración. El presente trabajo pone a la luz su verdadera turaleza. Al margen de su aparición obligatoria y pública. Confiesa también otra realidad ´ secreta ´ la herencia templaria, archivos secretos el dominio de la gnosis , o la reivindicación para su Gran Maestre , pierre plantard de u sangre y de un lije dinástico definitivo: con su posterioridad concluirá el Santo Imperio Romano y Cristiano y se cerrará la Historia de los hombres. Luis Miguel Martínez Otero, esclarece en esta obra la condición del Priorato , lo sitúa en el contexto impreciso de las sociedades iniciáticas entreguerras, en la primera mitad del s. XX. Aliza el amplio espectro de las mismas, que pueden conducirnos desde alto hasta lo muy bajo. Pone orden. El Priorato queda en su lugar y sitio. Y no es la menor tarea desembarazarlo de los inmensos despropósito que otros, más ilumidos, tan recientemente han escrito sobre él.
