El debate en la Flacso México sobre la reciente reforma educativa hace visible cómo se imbrican aspectos técnicos y polÃticos en una reforma que ha dado un lugar estratégico a la Ley General del Servicio Profesional Docente, debido a que la apuesta gubernamental para detonar cambios en la calidad ha elegido una ruta aparentemente técnica: la profesionalización docente.áLos trabajos aquà reunidos muestran que ese cambio aparentemente técnico en realidad entra en tensión con beneficios polÃticos ganados y adquiridos tiempo atrás por el magisterio, que el replanteamiento laboral no significa ni asegura necesariamente un cambio en la calidad educativa, y que el gran reto consiste en desatar el nudo de una reforma que ha tomado como ejes el control y la centralización encubiertos de evaluación, pero sin poner en riesgo la gobernabilidad del sistema educativo.