¿Qué significa, subjetiva y objetivamente, para una ´clase´ rural de campesinos mexicanos trabajadores estar ubicados como una fracción subalterna de las clases trabajadoras en Estados Unidos? Y en particular, ¿cuáles son las nuevas formas que asume la hegemonía, en México y los Estados Unidos, como en el espacio entre los dos, que lubrica este proceso donde están presentes el conflicto y la tensión permanente? Para intentar contestar estas preguntas la Dra. Cordero evita generalizaciones abstractas como la ´globalización´ e interroga sobre las relaciones concretas -tanto en Huaquechula como en Nueva York- que también forman parte de relaciones transnacionales más amplias. Ella es singularmente cruda acerca del impacto de la migración transnacional de los grupos domésticos locales, señalando algunas de las consecuencias lamentables que se presentan cuando padres e hijos o maridos y esposas experimentan periodos prolongados de separación. Su discusión sobre las relaciones de trabajo en los restaurantes y otros lugares, vistas en el contexto de nuevas hegemonías, nos ayuda a comprender materialmente el crecimiento del individualismo -manifestado en discursos de éxito y fracaso- y cómo esto sirve como una forma de disciplinamiento en la reproducción de una fuerza de trabajo subalterna.