Los trabalenguas que pusimos en este libro son para que se trabe la lengua y te diviertas destrabándola. ¿Me entiendes? No son para que sufras sino para que te diviertas. O a lo mejor sufres un poco... ya veremos. Además, puedes retar a tus amigos a que digan los trabalenguas: verás como a algunos, al tratar de decirlos y equivocarse, les van a salir palabras chistosas de la boca como al Negrito Sandía cuando le salía una culebrita loca-, y todos se van a reír.