´Confirmo la opinión que tengo de la escritora: resulta limpia, muy limpia en la lengua de Cervantes y es seguro que en su estilo narrativo, cuenta a un tiempo la influencia del castellano bíblico de la versión de oro Reina Valera... Agréguese la gran ternura, su experiencia frente a los problemas que aquejan al ser humano, pero contemplados a la luz de la doctrina de Jesús, y todo esto lo advertimos al `levantar´ la tapa de este cofre que guarda hermosos y aleccionadores relatos, como para ser leídos por chicos y por grandes, por mujeres y por hombres: la experiencia será grata´.áLuis Rublúo Islas, escritor.