Quien no planea su vida, deja que la vida lo planee. Las personas que dejan su destino en manos de la suerte o de los astros no pueden controlar su vida. Permiten que las ´´cosas les pasen´´ en vez de elegir las ´´cosas que quieren que les pasen´´. Si bien es cierto que el futuro es impredecible, también lo es que con un plan es más fácil enfrentarlo y aprovechar las oportunidades que nos presente. Tener un proyecto de vida significa tener metas. Las metas son grandes motivadoras, son capaces de hacernos descubrir potenicalidades que desconocemos y de hacernos alcanzar alturas impensables. Las aspiraciones sólo son buenos deseos si no las transformamos en proyecto, si no diseñamos el camino que nos conduzca a su realización. Nunca es tarde para elaborar un proyecto de vida. Si usted aún no tiene el suyo, este libro lo guiará paso a paso hasta terminar y aplicar lo que será el mapa del resto de su vida.
