Para la arquitectura, el diseño interior y la decoración, el uso del color es una necesidad y su manipulación se convierte en un atractivo reto. Los profesionales recurren al color para conseguir efectos tales como acentuar la volumetría de las edificaciones, señalar profundidades, proponer alguna impresión de temperatura, generar puntos focales, crear un ritmo, sugerir estados de ánimo, buscar contrastes y armonías, aumentar o disminuir la luminosidad de una atmósfera, destacar o disimular las partes u objetos, entre una vasta lista. De la buena aplicación de los matices cromáticos depende el éxito decorativo que se alcance, por ello es necesario estudiar las posibles combinaciones y ver cuál es la mejor que se ajusta al ambiente que se busca. Es de suma importancia considerar la orientación de la casa, así como las entradas de luz natural y el diseño de la iluminación artificial. A fin de cuentas, el color no existiría sin la luz ya que es un fenómeno que se deriva de la interacción como está. También es relevante la dimensión y la forma de la habitación, el aspecto de los muebles, el uso al que se destina el espacio y las características sensoriales, anímicas y ópticas que se le desean dar. Este libro presenta algunos tips, consejos y soluciones a los que han llegado los diseñadores para usar adecuadamente el color en la diversas áreas de la casa.
