¿Quién puede dar una definición univoca de lo que es bien? ¿Y de lo que es virtud? ¿Y de lo que es bello?áLas ideas de las cosas (mesa, caballo, árbol) ¿residen en nuestra mente como arquetipo o son una abstracción, resultado de nuestras experiencias sensibles?áVivir según la naturaleza ¿implica aceptar lo que la naturaleza nos impone o somos nosotros libres de influir sobre ella?áEran las preguntas que los filósofos éticos se hicieron cuando, abandonada la filosofía física de los presocráticos, dirigieron su atención al hombre. Muchas de esas preguntas han quedado sin respuesta hasta nuestros días, y, de hecho, ya en esos tiempos algunos escépticos afirmaron que hubiera sido imposible, para el hombre, alcanzar la verdadera sabiduría, es decir la verdadera filosofía. Sin embargo de esas preguntas surgieron las reglas del vivir cotidiano que han influido desde dos mil cuatrocientos años sobre nuestra educación.La filosofía no es una ciencia para iniciados. Todos los días, en nuestras familias, en el trabajo, en el restaurante, hacemos razonamientos filosóficos, porque la filosofía es de todos.