Parecería a la distancia que la Guerra Cristera fue un conflicto estrictamente nacional, desatado por el anticlericalismo de los gobiernos posrevolucionarios, protagonizado por la Iglesia católica mexicana y combatido, principalmente, a lo largo de las llanuras del Bajío. Sin embargo, está claro que no existen, ni en el presente ni en la historia, acontecimientos aislados, puramente locales ni desconectados del ámbito internacional. La verdad, entonces, es que la Guerra Cristera fue un hecho tan mexicano como universal: aunque localizado aquí, sus ondas sacudieron a todo el mundo. Convocados por el historiador lean Meyer, máximo especialista en el tema, dieciséis reconocidos investigadores exploran, en este volumen, los años más violentos -entre 1926 y 1929- de la Guerra Cristera. La novedad es que lo hacen desde diferentes miradores: Alemania, Argentina, Bélgica, Brasil, Canadá, Colombia, Chile, España, Francia, Hungría, Inglaterra, Irlanda, Italia y Polonia. El resultado es un diálogo a muchas voces en torno a estas y otras cuestiones: ¿Cómo se interpretaba la guerra más allá de las fronteras? ¿Qué posiciones diplomáticas adoptaron esos gobiernos? ¿De qué manera respondieron los católicos de esos países? Si aún había alguna duda, en este libro queda claro que para comprender nuestra historia hay que atender, también, a las historias de los otros.
